
21 Abril 2017
Día 9
Unas vistas del laguito, el Pabellón Belvedere y las esculturas que lo rodean...




Los jardines aquí son distintos ya que María Antonieta quería recrear paisajes mas "naturales"...




Este es el Templo del Amor, que se puede ver desde el Pequeño Trianon; con la estatua de Cupido en el centro (la original está en el Louvre)...


Y luego llegamos a la Aldea de la Reina, al acercarnos nos recibió un Plátano plantado en 1798. Es un pequeño pueblo que María Antonieta se mandó hacer para escaparse de la rigidez de la corte...


Ahí disfrutaba rodeada de sus damas de compañía, y los productos de la granja abastecían las cocinas del Palacio... La casa de la Reina era el edificio mas importante unido por una galería de madera a la casa del billar, era lo único que no pudimos ver ya que estaba tapado por esa estructura verde (que no tiene nada que ver con lo que hay debajo) porque estaba en restauración. Ahora ya se puede ver: click acá...
A un costado está el Gabinete o Casita de la Reina, rodeada de un jardín cerrado...


Esta era la Casa del Suizo, que era el guardián del Dominio de María Antonieta.
La Torre de Marlborough o Torre de la Pesquería, de donde salían a pasear y pescar carpas y lucios por el laguito. La parte alta servía para comunicarse por señales con el Palacio de Versalles... Al lado hay una lechería con mesas de mármol y vajilla de porcelana donde la Reina disfrutaba sus productos lácteos...




También había un palomar un granero, un molino y otras casitas que no sobrevivieron ya que todo fue abandonado después de la Revolución Francesa...


Esta era la Granja Educativa, con muchos animales y donde hacían experimentaciones hortícolas...


Dimos toda la vuelta y al atardecer regresamos al Pequeño Trianon...


Ya eran las 7 de la tarde y regresamos al Palacio por la Avenue de Trianon, parece que esa avenida está afuera de los límites deVersalles pero estaban las rejas abiertas así que no hubo problema para volver a ingresar, debe ser por la hora...


Entramos por un costado, donde está el inmenso Estanque de Neptuno, que en su momento se llamó: Estanque bajo el dragón, ya que la escultura del dios del mar se colocó mas de medio siglo después...




Fue la única obra de importancia en Versalles durante el reinado de Luis XV, tiene mas de 150 metros de largo y es hermoso...


El camino nos llevaba en subida hacia el Palacio, con todo lo que habíamos caminado...






Y subir las escalinatas para llegar a la terraza y sacar unas últimas fotos hermosas del atardecer




Salimos y a las ocho estábamos llegando a la estación de tren para regresar a París...




Y a la noche para festejar este flor de día nos tomamos un Cabernet d'anjou rosadito...
